Ciclo de la vid
La vid, su mágica biología presenta una gran actividad a lo largo del año y diferenciada según la estación

Cada año, la vitisvinifera pasa a través de un ciclo de desarrollo, estrechamente relacionado con las diferentes estaciones. En el periodo cálido de este ciclo, el de crecimiento, se forman hojas, flores y frutos; entonces muere, después de que la fruta haya madurado.

El período total desde la brotación vegetativa hasta la vendimia es de 4 a 6 meses aproximadamente. Después las hojas se empiezan a caer y los sarmientos cambiarán de verde a café, convirtiéndose en leñosos. La combinación de pérdida de follaje y bajas temperaturas al acercarse el invierno obligan a la vid a entrar nuevamente en un periodo de letargo y el ciclo se inicia de nuevo...


Lloro: Es la primera manifestación externa del paso de la vida latente a la vida activa, donde se derrama savia.

Brotación: Se empiezan a formar yemas en la cabeza o cordones de la vid. Estas yemas con el tiempo se convierten en sarmiento que formará las hojas. Las hojas permitirán que la vid acelere su crecimiento al empezar la fotosíntesis. 


Floración: Crecen tiernos zarcillos verdes de los sarmientos entre las hojas y forman un racimo ramificado de pequeñas flores. 

Cuajado: Una vez que las flores han polinizado, cada flor individual se convierte en una pequeña uva con un nivel de acidez extremadamente alto. 

Envero: A medida que las pequeñas uvas crecen, comienzan a formarse en su interior azúcares, compuestos aromáticos y minerales, y empieza a disminuir la acidez Las uvas experimentarán un cambio denominado envero: la piel del grano se vuelve suave y traslúcida y se determinan las características típicas de las variedades. 

Maduración: Al ir madurando las uvas; las semillas alcanzan su capacidad reproductiva, los sabores se desarrollan, los pigmentos se oscurecen y, en el caso de las uvas tintas, los taninos maduran. La vendimia o cosecha empieza, con ciertas variaciones en el momento exacto, dependiendo de las características de madurez que los viticultores consideren adecuadas. 

Sobre maduración: Mediante la sobre maduración se obtiene una concentración de azúcares, desaparición parcial del ácido málico y posible deshidratación. Es realizado para producir vinos con azúcar residual o dulces. 

Hibernación: La vid permanece en estado letárgico (“dormancia”). No presenta signos exteriores de vida pero están ocurriendo procesos dentro de la planta: la vid extrae agua y nutrientes de la tierra, transformándolos en energía almacenada para la primavera. 

Poda: Se eliminan todas las varas para darle una forma determinada a la vid según el tipo de conducción elegido y para seleccionar las yemas para la generación de brotes. 

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